Conozco la sonrisa brillante de las mañanas...
Las tardes melladas,las desdentadas noches.
Sé del aullar de gigantes en lumbres aspas de molino
,sé del letargo de los sentidos entre el estruendo de monedas,sé del néctar de las bocas y de su aliento en la nuca,
sé de las palabras inútiles como bolitas de humo,y de camas deshechas como lienzos desflorados.
Sé de los bordes cortantes del canto herido,
sé de su demencial cordura.
Desconozco, sin embargo, ese rostro vagamente familiar,
que me mira a cada instante desde el espejo...


-kutxi Romero-

29 de marzo de 2011

REALIDADES.

Entre guerras anti-humanos, que no humanitarias. Temblores de la tierra que protesta ya en países pobres y ricos. Crisis occidentales, que no mundiales, aunque se crean los dueños del mundo. Reinas que ajenas a todo se divierten abrazando pandas. Campañas pre-elecciones que siguen sin mostrar soluciones sino discusiones. Belenes estaban y demás personajes intoxica-cerebros que se hacen ricos mientras cadenas serias donde se decían verdades son censuradas...

Entre todo... un brindis, emocionante, que me dio un atisbo de esperanza. Un brindis por la multiculturalidad, la integración, el respeto y convivencia de diversas culturas. 25 paises estabamos representados brindando en una mesa escondida en esos bares que califican de bohemisos del historico barrio del gótico. Desde Irán, pasando por Estonia, Marruecos, Italia, Francia, México, Chile, España, Ecuador... todos unidos por el afán de integración en un lugar que no era el nuestro. Pero del que nos estabamos enriqueciendo cada uno de nosotros, aprendiendo de su cultura propia, y de la multiculturalidad que desprenden las misteriosas calles catalanas.
Lo más irónico de todo, es que estabamos allí unidos por una lengua. Una lengua que es utilizada como arma política para criticar, separa y prejuiciar dentro de un mismo país, en el que los medios de comunicación transmiten imágenes que no son ciertas de ambos bandos, y crean en el imaginario colectivo sin explicarnos, ni si quiera inducirnos a enterder las diversas realidades.

El choque de las copas significaba mucho más que un fin de clases, significaba que era real la posibilidad de convivir todos, de abrir la mente y intentar comprender en persona todas las realidades, aprender y enriquecernos de ellas.

Significaba que el mundo real es redondo, y tenemos que concerlo como tal, no a través de un cuadrado, que muchos llaman caja tonta, aunque para mi es el dictador más inteligente e incubierto de todos los tiempos.