Conozco la sonrisa brillante de las mañanas...
Las tardes melladas,las desdentadas noches.
Sé del aullar de gigantes en lumbres aspas de molino
,sé del letargo de los sentidos entre el estruendo de monedas,sé del néctar de las bocas y de su aliento en la nuca,
sé de las palabras inútiles como bolitas de humo,y de camas deshechas como lienzos desflorados.
Sé de los bordes cortantes del canto herido,
sé de su demencial cordura.
Desconozco, sin embargo, ese rostro vagamente familiar,
que me mira a cada instante desde el espejo...


-kutxi Romero-

23 de julio de 2009

" Es que no tenían nada, pero eran super felices".

Venía envuelta en su burbuja particular. En la burbuja que había creado en ella aquel virgen lugar, en el que se limpiaban, se alimentaban, se divertían, vivían… de sonrisas. Donde nada importaba, más que bailar al ritmo de la vida, aunque los bienes materiales fueran ínfimos comparado con le lugar de donde ella procedía, los bienes que se encontraban allí, era un tesoro, mucho más importante. Convirtieron sus ojos en una brillante luz de esperanza, y su sonrisa en el optimismo que se necesita para superar todos los obstáculos de la vida.

Me daba tanta envidia, por unos días había conseguido escarpar de su realidad a otra realidad, desaparecer por un tiempo sin ningún tipo de contacto ni comunicación con su otro mundo. ¿Cuántas veces habremos deseado eso?. Por unos días, su mente no fue bombardeada con gripe A, ni crisis, ni siquiera con la muerte de aquella estrella que de repente todos idolatran. Su mente era libre, para encontrarse a sí misma, para fundirse con la naturaleza, para ayudar por placer, para aprender esas cosas, que te enriquecen como persona, cosas que ni en las aulas, ni en nuestra realidad podríamos aprender nunca. Aprendió a vivir sin nada, pero con mucho.

No quedaba más remedio, que volver a su realidad, pero ella ya no era la misma, y su realidad a partir de ahora iba a ser otra, porque ella era otra. La vuelta a su mundo llegó con 11 horas de retraso, pero daba igual, porque su burbuja no dejó que sus ojos dejaran de brillar, ni que su boca dejara de sonreír.

No es más que envidia lo que puedo sentir, porque mis ojos cada vez se apagan más, mientras más miro a mi alrededor, y mi sonrisa pierde vida día a día.

1 comentario:

  1. CUANDO MI MIRADA PIERDA ESA LUZ, ESA ALEGRÍA VIVIDA, ESA FILOSOFIA APRENDIDA, LEERE ESTO Y VOLVERÁN A BRILLAR.
    SOLO CERRANDO LOS OJOS REGRESO A ESE LUGAR EN EL QUE CONSEGUÍ ABSTRAERME DE LA RUTINA, DEL RITMO COTIDIANO, DE STRESS, DE LOS PREBLEMAS, O DE LO QUE CREEMOS QUE SON PROBLEMAS; PORQUE NO ES NECESARIO TENER MUCHO PARA SER FELIZ!!!

    GRACIAS, POR LA PALABRAS, GRACIAS POR LO ESCRITO, ES UN BUEN RESUMEN DE MI PEQUEÑA AVENTURA!!!!

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